INTRODUCCIÓN
Comienza el año 2000 y aquí estoy como un pringado escribiendo en mi nuevo diario. Con 15 años me da vergüenza hacer esto, lo reconozco. El día 15 de Marzo haré 16 añitos, con lo cual más vergüenza me dará. Espero que mis padres no les cuenten a mis amigos que estoy obligado a escribir este asqueroso diario.
Y todo por tener una promesa con ellos. Si aprobaba el curso, podía elegir cualquier ciudad para visitarla y pasar allí 1 semana entera. Es mi ilusión desde pequeño el perderme en una ciudad que no conozco. Ellos ahorrarían dinero para mí. Por otro lado, si repetía, tendría que escribir todos los días en este dichoso diario a partir del año que viene, y ese año ha llegado hoy.
Maldita sea, repetí y ahora me toca escribir aquí. ¡Qué gilipollas que soy para los estudios!
Ahora no me queda otra que coger bolígrafo y diario y escribir día a día lo que me vaya ocurriendo.
¡Qué divertido, vaya! ¡En días como hoy me arrepiento de haber nacido, soy un desgraciado!
No tengo suerte en nada, ni tan siquiera tengo un nombre habitual. Me tengo que llamar Zacarías. A veces llego a pensar que mis padres me pusieron el nombre en una borrachera familiar. No es normal lo mío, pero ya estoy acostumbrado.
Voy a escribir lo que me ha pasado hoy durante el día. Aún no he empezado a relatar mi diario y ya estoy agobiado... ¡Qué asco, si esto es cosa de chicas!
Miércoles, 1 de Enero 2000. (Año nuevo)
Hoy comienza un año, una década y un siglo nuevo, y para mí la vida sigue estando pintada de la misma forma. Supongo que las cosas en mi casa no cambian de un siglo para otro. Tenía que hacer la gracia... porque hoy no ha sido un buen día.
Son las 20:00 de la tarde. Mi hermano me ha recordado delante de mis padres que hoy tengo que empezar a escribir el diario. ¡Qué bocazas es! Mis padres no recordaban que debía empezar a escribir a partir de hoy.
¿Y qué escribo yo aquí? Me comentaron mis padres que debía explicar lo que me ocurriera cada día con detalle. Les haré caso... explicaré todo al detalle.
¡Hoy he pasado el día vomitando y me he prometido a mí mismo que no volveré a beber nunca más! Tengo que reconocer que anoche me pasé y mucho con la bebida, pero como he dicho, no volveré a beber más. Odio la bebida y la resaca. También odio que mis padres me echen la bronca. He llegado a mi casa a las 6:00 de la mañana tras pasar una estupenda Nochevieja con mis amigos y lo primero que he hecho a llegar ha sido abrir la puerta y dejarme las llaves fuera de casa colgando de la cerradura. Es extraño, tardé 5 minutos contados para meter la llave en la cerradura. Supongo que de la euforia me olvidaría de ella al entrar en casa.
Mi madre esta mañana se ha dado cuenta del detalle, y nada más levantarme me ha echado la bronca y me ha dado mis llaves.
Lo bien que estuvo la Nochevieja, y lo mal que empiezo el año. Voy a cenar, mi madre me llama, y no quiero más broncas.- Mañana será otro día.
Jueves, 2 de Enero.
CONTINUARÁ..